miércoles, 25 de agosto de 2021

Return to forever

 UN SEGUNDO DISCO PARA ESTE VERANO  

“RETURN TO FOREVER”

Esta se la debía a mi amigo “Trespa”, que seguro sigue progresando con la percusión. Él me avisó de la muerte de Chick Corea en febrero y le contesté que me pillaba lejos de mi colección de vinilos pero creía tener casi todos los Lps de su grupo de referencia inicial, “Return to forever”. Ahora en Orduña he podido comprobar que casi bingo, así que ahí está la foto para demostrarlo. También tengo algún otro de Corea sin el grupo, además de un doble con otro de los pianistas míticos de la época: Herbie Hancock. Todo un tesoro...

Hacía tiempo que no oía “Return to forever” (ECM - 1972), disco que da nombre al grupo, y también que tenía olvidado a Corea, pero desde luego que este disco forma parte de mi itinerario musical y hasta podría decir que, junto a la aparición de la Mahavishnu Orchestra, de mi visión del jazz y quizás de la música en general. Le llamaré jazz, aunque creo que ya conté que en mi experiencia como tendero de discos había un tipo que nos la tenía jurada porque decía que aquello, y desde luego que tampoco lo de Weather Report o similares, era jazz.

De la primera oída de “Return to forever” recuerdo principalmente el impacto de “Crystal silence”, una de esas melodías que crean adicción, pero sin duda la pieza clave del disco es “Sometime ago / La fiesta”. Esta tiene un inicio a medio gas, con la bellísima voz de Flora Purim y su toque brasileño, pero va ganando instrumentos y fuerza hasta acabar en un apoteósico fin de fiesta, nunca mejor dicho, ahora ya con el toque hispano mejicano que caracterizó la primera etapa de Corea. Aunque algunos sonidos, quizás el mismo teclado de Chick y la flauta de Farrell hayan envejecido algo mal, en su momento convulsionó el mundo del jazz. De eso no hay duda.

Lo lamento, pero no he encontrado una versión en Youtube del disco original, así que os tendréis que conformar (conformar???) con esta actuación del grupo, sin Flora Purim, el mismo 1972. Ah! y un recuerdo para Charlie Watts, el batería impasible, que nos dejó anteayer...


https//youtu.be/OBfihSAIVKQ

lunes, 16 de agosto de 2021

El nervio óptico

 PASTELES GUIADOS POR “EL NERVIO ÓPTICO”

PASTELES Y COPIAS.- Con la pandemia he vuelto a sacar los pasteles – me refiero a esa especie de tizas polvorientas – una técnica que, aunque sucia, te permite trabajar en pequeños formatos. Hace ya muchos años solía coger la bicicleta, un bloc y una caja de pasteles e irme a pintar por el valle de Arratia.

También con la pandemia me he atrevido con una disciplina que siempre había entre rechazado y menospreciado, el copismo, seguramente porque era y soy incapaz de hacerlo medianamente bien, pero nunca es tarde…, así que hace unos dos o tres meses me lancé a ello y, chulo que es uno, nada menos que con Tintoretto y El Greco…

En ello estaba cuando se cruza en mi camino uno de esos libros que se compran esperando tiempos mejores, “El nervio óptico”, de María Gaínza (Buenos Aires – 1975), literatura inclasificable y compleja, relatos?, ensayo?, pero tan atractiva que pide una doble o hasta triple lectura para desentrañarla.

Crítica de arte con un gusto un tanto peculiar, pienso que irónico, Gaínza traslada su mirada a una serie de cuadros de pintores “raros”, que enaltece creando un relato autobiográfico paralelo. El caso es que pensé que selección tan singular, en algún caso “feísta”, me permitía abordar la copia con un desenfado indulgente, así que manos y tizas a la obra... El resultado son los cuadritos sobre papel que acompañan a los textos de "El nervio óptico", de los que tengo que decir en mi defensa que ejecutados en apenas hora y media y sin dibujo previo. Quien quiera ver el original que se lo curre en internet. No voy a ser yo el idiota que desentrañe la imperfección de la copia...



ALGUNOS CUADROS Y TEXTOS DE “EL NERVIO ÓPTICO”.- 
El libro demuestra que el nervio óptico de María Gaínza, un filamento que agrupa y conecta más de un millón de fibras nerviosas al cerebro, está en perfecto estado, y aunque no su gusto pictórico sí una escritura que enternece ciervos, ruinas y mares borrascosos. He aquí algunos ejemplos.

DE “EL CIERVO DE DREUX”“...Hay, en realidad, dos Dreux en ese salón, dos escenas de caza pintadas a mediados del siglo XIX, pero a mí se me van los ojos hacia una, y aunque la descripción de cuadros sea siempre un incordio, no tengo opción: es una pintura vertical, en ella una jauría de perros acorrala a un ciervo, el combate animal está apilado en la parte baja del cuadro y en la parte alta, que juraría fue agregada después para adaptar la pintura a los altos techos del salón, hay un paisaje de cielos celestes, nubes encrespadas y un árbol genérico que podría ser cualquiera. Es una pintura bastante convencional, no se lo voy a negar, pero aun así me atrae. Es más, me pone nerviosa...

"...El ciervo ha sido pintado pocos segundos antes de morir. Un perro le muerde el lomo; otro, una pata. El animal está a punto de desplomarse, la lengua afuera, el cuello en una contracción exagerada, los ojos mirándonos con el mismo desamparo con que la liebre miraba al príncipe en El Gatopardo de Lampedusa..."

"...Avanzaron despacio, había barro en el camino y el viento soplaba entre las casuarinas. «Es época de liebres, por ahí vemos alguna», dijo el chico. Cuando llegaron al final de la avenida pegaron la vuelta. A lo lejos, desde el bosque vecino, sonó un cuerno. Alguien llamaba a los perros para que regresaran. En ese momento a mi amiga se le hundió una bota en el barro. Forcejeó un poco para liberarla. Medio metro adelante, su compañero le ofreció la mano pero ella se negó: «Puedo sola», murmuró impaciente; un segundo después una bala perdida le entraba por la espalda a la altura del pulmón.
Se desplomó sobre el barro; el francés dijo que en su cara solo había sorpresa: «¿Esto era todo?», parecía decir. «¿Ya está?»...”

DE “EL ENCANTO DE LAS RUINAS”“...Hubert Robert no inventó la estética del colapso pero la llevó a su gloria. La poética de la ruina era la moda a fines del siglo XVIII y el joven Robert la había conocido a través de su maestro René Slodtz...

"...Robert era un hombre celebrado por su época cuando la suerte se le agotó. De golpe, todos sus hijos murieron, uno detrás del otro: Gabriel, Adelaide, Charles y Adèle. Cuando Napoleón llegó al poder lo expulsó de la Academia. Prisionero en Saint-Lazare, compartiendo celda con el marqués de Sade, en la cárcel donde un siglo antes se encerraba a las ovejas negras de las buenas familias, escapó por muy poco de la guillotina cuando, por error, otro prisionero fue ejecutado en su lugar. Una vez en libertad, fue uno de los cinco asesores en la creación del Louvre; su sueldo era simbólico, apenas le alcanzaba para el almuerzo. Una medianoche, llegaba de trabajar en los planos del futuro museo cuando, al entrar en su taller, que era muy pequeño y abarrotado, se tropezó. Así imagino yo que murió Hubert Robert, desnucado por su atril romano. Tenía setenta y cinco años, ya no le quedaba nadie en el mundo y debía nueve meses de alquiler….”

DE “REFUCILOS SOBRE EL AGUA”“...El cuadro se llama Mar borrascoso y está en el Museo Nacional de Bellas Artes. Mer orageuse se dice en francés, y la gárgara rasposa que producen las consonantes replica el rugir de las olas. En primer plano una ola cargada de espuma rompe contra las rocas; a la altura del horizonte, el agua y el aire se mezclan; más arriba, el cielo se desfleca en nubes rosadas. Es un óleo realizado en 1869 y mide casi un metro por un metro, el tamaño justo para colgar sobre la chimenea, si tuviera una. ¡Qué lindo ver arder un fuego debajo de ese mar!..."

"...Como pintor, Courbet era territorial, instintivo como un perro. Había crecido cerca de la cordillera del Jura, en una zona lluviosa donde el agua se filtra por la piedra caliza, los acantilados, las cuevas y los valles formando canales subterráneos. El mar de Courbet encuentra su textura en ese paisaje. La forma en que el pintor usa la espátula es diabólica: rasquetea la tela, raspa el óleo como si quisiera marcar una roca. Aun con toda su pose de machote del arte, sus tácticas y estrategias para ganar notoriedad, Courbet no deja de volver una y otra vez a la región de su infancia. Pinta el agua como un mineral fosilizado, una malaquita partida al medio…"

"...Una sola vez ella me habló a mí; fue la tarde en que nos íbamos. Me llevó a su cuarto y me mostró las paredes todas cubiertas por los collages. Fue como ver la ola de Courbet desde adentro.
—Ya casi terminé —dijo ella sonriendo, un poco demasiado, como alguien que lo ha perdido todo.
Meses más tarde supe que se había ahogado, cerca de la escollera del norte, una tarde en que el cielo estaba celeste y desflecado por nubes rosadas
Nos llamábamos igual, mi prima y yo. Recién ahora me doy cuenta de que nuestro nombre contiene al mar como un llamado, como una premonición…”






Creo que Coldplay, con esta maravilla que dicen estimulada por un cuadro de Frida Kahlo, puso su listón musical demasiado pronto y demasiado alto. 






https://youtu.be/dvgZkm1xWPE

miércoles, 4 de agosto de 2021

Mark-Almond

 “OTHER PEOPLES ROOM”, DE MARK AND ALMOND

UN PRIMER LP PARA ESTE VERANO

Como cada verano aprovecho mi estancia en Orduña para darle vuelta a los vinilos y ver si la aguja y el viejo pero aún resplandeciente NEC es capaz de sacarles su sonido arcano. Este año ya venía, no sé muy bien porqué, con la idea de este microsurco, qué viejuno suena, no?, así que, ahí vamos.

Editado en 1978, leo ahora que no es el mejor disco del dúo, pero como es el Lp que yo tengo no voy a cambiar de ruta. Tiene además un contenido que, memoria personal aparte, me parece francamente digno, en algunos momentos, como en la versión de la pieza inicial, “The city”, con momentos brillantes. 

Puede decirse que la vida musical de Jon Mark y Jhonny Almond, no confundir con Marc Almond, fue de más a menos. Ambos tienen unos inicios titubeantes, más prometedores los de Almond, saxofonista y multi-instrumentista, que pronto comparte banda, discos y actuaciones con grandes como Marianne Faitfhull, Nicky Hopkins, Fleetwood Mac, Joe Pass, John Mayall, en algunos de cuyos discos ya coincide con Mark. Puede decirse que ese es su gran momento, el que les hace crear una banda común y cosechar éxitos y notoriedad hasta su disolución algo más de una década después, 1981.

Tras su ruptura Mark y Almond siguieron caminos muy diferentes: Mark continuó trabajando hasta su reciente fallecimiento en febrero de este mismo año, si bien principalmente en discos de música ambiental. En cuanto a Almond, se retiró a la bahía de San Francisco y abrió una ferretería. De vez en cuando llevaba su saxo a los bares de colegas o colaboraba con Garaje Band, un grupo que tocaba en fiestas, bodas y otros eventos. Murió en 2009, alejado del mercado discográfico y prácticamente olvidado por los críticos.

“Other peoples room” es un disco de funky-jazz sofisticado, una obra de estudio muy redonda, gracias a colaboradores a los que podemos ver en multitud de grabaciones estelares. Gente como el batería Steve Gadd, el bajista Will Lee, o Ralph McDonald, también percusionista, músicos de estudio con hiperactividad en aquellos tiempos y una producción que cuidaba el acabado, incluidas portada y contraportada. Quizás demasiado evidente, con poco brío, pero sin un solo error y con un Mark en su mejor momento vocal. Oyes ahora a Jose James, uno de los vocalistas de jazz más en boga, y piensas que ha tenido que oír a este Mark en horas altas. Almond, que era también, no lo olvidemos, un saxofonista de estudio, entra cuando tiene que entrar. Así que ni un reproche, todo en su sitio. Pero bueno, lo mejor es oírlo y degustar un tipo de jazz muy de la época. Mejor de noche, con tranquilidad, media luz y una copita de lo que sea…

El otro corte es el sonido con foto estática de la única actuación en directo que he encontrado en Youtube.


https://youtu.be/qN1FdMbKMrI


https://youtu.be/x_T3CV2_Xzg